Una vez propuesta la teoría de educación como modelo científico, como efecto de varias visiones realizadas por diferentes campos en cuanto a las interpretaciones del cual debiera ser el verdadero que hacer educativo, encontramos a Marc Belth, el cual mediante su trabajo se destacan varios puntos, los cuales marcan diferencia en su teoría (Educación para aprender a pensar) y que la hace muy importante de analizar.

Principalmente Belth considera que la educación, debiera ser un sistema independiente, es decir libre de toda influencia que pudiera causar cualquier otra institución sobre esta.

Con el fin de de entender mejor esto se establece un enlace con lo establecido por Bourdieu, en cuanto a la imposición de practicas pedagógicas, debido a que estas generan una falta de libertad para pensar, las cuales provocan un estado de violencia simbólica, impidiendo el libre desarrollo individual de cada persona. En este estado se producen por parte de los alumnos las practicas que son llamadas ‘habituales’, que generan la arbitrariedad cultural, debido a que de un modo u otro provocan que lo educado sea determinado, lo cual significa que posee limites establecidos.

Claramente opuesto a lo que se establece Belth en cuanto a la importancia que le da al lograr que los educandos aprendan a pensar, argumentado que es valido y necesario para el desarrollo interno del ser humano, que lo hace ir en búsqueda de su propia identidad, la cual se produce al ir desarrollando los métodos de investigación y creación, que son claves en el objetivo que busca la educación en esta teoría.

Por ultimo Belth considera que la libertad del individuo se construye cuando se centra en su facultad de aprender a pensar adecuadamente, libre de toda presión social, teológica o necesidades de desarrollo por parte de la cultura donde vive, las cuales lo único que provocan es atarlo a la estructura de un modelo determinado